Gastamos dinero que no tenemos,
en cosas que no necesitamos
para impresionar a gente que no le
importamos.
Si nada nos puede salvar de la
muerte,
al menos que el amor nos salve de las
banalidades de esta vida.
En una clase de ética se le preguntaba a los alumnos: si
ustedes vieran un billete de mil pesos en un basurero lleno de lodo, peste,
desperdicio, incluso un poco manchado de excremente de un pañal de bebe ¿lo
quisieran? A lo que muchos con cierta aversión respondían: de todas formas
maestro el billete no pierde su valor, nada más se limpia y vuelve a servir. A
lo que el maestro les preguntó: ¿y si en lugar del billete de mil fuera una
persona la que estuviera en el basurero? ¿Lo limpiarían y volvería a servir?
Los alumnos no supieron que responder. Con esta anécdota quisiera empezar a
analizar el poder del dinero y lo que vale para nuestra sociedad, desde las
épocas más arcaicas se veían las desmedidas valoraciones del dinero, la
perversidad, la confusión y la alienación que causaba a los que lo poseían. A lo cual Shakespeare escribe:
Es lo único
verdadero:"¡Dinero!, ¡Dinero maravilloso, brillante, precioso! ¡No, oh
dioses, no soy hombre que haga plegarias inconsecuentes! Un poco de él puede
volver lo blanco, negro; lo feo, hermoso; lo falso, verdadero; lo bajo,
noble". Se trata del dinero. Incluso se piensa que el
dinero es el origen de todos los males en este mundo: movimientos
sociales, guerras, revoluciones, homicidios, creador de valores, parece que
dinero es la divinidad palpable y real de este mundo, el que lo posee tiene la
vaga sensación de ser dios.
La cultura del
Tener, que es causada por el consumo, constantemente invita, aconseja y exhorta que para alcanzar
la felicidad sólo es posible teniendo
todo, a lo que constantemente se
presentan varios modelos de Tener, desde propiedades, autos, estudios, viajes,
moda, peinados, físico, salud, lujos, celulares, etc., de esta manera causa una
psicosis, frustración y sufrimiento en la sociedad a todo aquel que no puede tener
Todo. La frustración es muy alta y el suicidio se torna un camino viable para
muchos en nuestra sociedad. La frustración que causa esta cultura del Tener se
manifiesta en tantas salidas fáciles o paliativos que calmen la desilusión.
El Tener no te hace Ser buena persona, el ser
persona va más allá de tener lo que dice la sociedad que debes tener. El
desmedido afán de riqueza que constantemente se promueve entre nuestra
sociedad, hace que las personas entiendan que el máximo valor es el dinero y los demás valores sean un medio para alcanzar
el dinero, en nuestra sociedad lo explica de mejor manera el famoso dicho
popular “el que no tranza no avanza”. Las personas se miren con recelo,
desconfianza, no se ve la dignidad sino la superficialidad, las relaciones se
vuelven interesadas, mercenarias e incluso el amor se vende, se piensa que todo
tiene en precio, todo tiene un costo, nada se regala, nada es gratis, aquí es
donde surge una gran pregunta: ¿existe algo más valioso que el dinero?